sábado, 3 de octubre de 2009

LA FAMILIA MONSTER



Era yo muy pequeño cuando recuerdo que ponían por TVE, concretamente por la 2ª cadena (lo que entonces llamábamos el UHF), los capítulos de esta maravillosa serie.

Ya entonces me parecía fascinante poder reírme a gusto con los personajes de terror que tanto miedo me daban en aquel entonces.

Pero es que ahora, con el paso de los años, y después de ver nuevamente esos capítulos, veo con agrado, que los años no han pasado para esta extraordinaria serie.

Su originalidad, la forma perfecta de unir a los más carismáticos personajes del cine de terror de todos los tiempos, los repetidas escenas humorísticas, los efectos especiales, que para la época, eran perfectos y las disparatadas situaciones en las que se ven envueltos los protagonistas. Todo esto hace de esta serie una verdadera joya de la televisión. Creo que debería ponerse como ejemplo de cómo se debe hacer una buena serie de humor.

La escenificación es perfecta. La casa envuelta siempre en penumbras y bajo una fuerte tormenta, con el interior lleno de telarañas y la puerta siempre chirriante.

El niño, que duerme en un armario, con un muñeco del hombre lobo, Marilyn, la sobrina, que para nosotros es la “normal”, pero que para ellos es la “fea” de la familia.

El abuelo, que es nada menos que Drácula, siempre sumido en sus inventos, o colgado de alguna lámpara. O Lily, la vampiresa, su hija, la señora Monster. Nada menos que interpretada por Yvonne de Carlo.

Pero el personaje que se lleva la palma, para mí, es sin duda alguna, Herman. El cabeza de familia. Nada menos que ¡el monstruo de Frankestein! Es absolutamente genial. Un continuo despropósito de gags humorísticos rodea a este impresionante monstruo que, a su vez es un pobre infeliz.

Claro, que por sí solo, no sería lo mismo. Es el conjunto de esta particular familia, que bajo una cotidianeidad de cualquier familia normal, está formada por estos personajes.

Además, hay que tener en cuenta que los personajes están caracterizados como sus originales del terror.

No oculto lo más mínimo mi entusiasmo por la Familia Monster, que debe ocupar, sin duda alguna, la videoteca de cualquier familia.


MANOLO